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Los clientes nos dan sus fondos para que seamos garantes de que los mismos se encuentran en buen estado y al momento de presentar un balance el cliente sepa que lo que se ha reportado en informes, igual este físicamente. 

Hoy en día el tener un inventario exacto puede ser el principal elemento en una operación de distribución la cual puede marcar la diferencia competitiva en el mercado logístico. Con esto detallamos las mejores prácticas para lograr y mantener exacto el activo principal de una operación:

Inventario cíclico

Como su nombre lo define, es un recuento de los inventarios físicos planeados para ejecutarse varias veces durante el curso del año o ejercicio fiscal. Se puede planificar según la necesidad de cada compañía en una base mensual, bimensual, trimestral o semestral. 

Adicional se puede incluir variables como conteo por ubicación, familia/franquicia de producto y/o por alta/baja rotación. La combinación de frecuencia y tipo de conteo depende de la industria y el valor del producto. 

La principal ventaja del recuento cíclico es la depuración de errores de inventario. Si se produce un fallo de cualquier tipo, es más fácil identificar, ubicar, actuar en consecuencia y corregir estos errores en el momento de presentarse en vez de dejarlos acumular para entrar plenamente juntos al final del año.

Diseñar áreas de surtidos y reabastecimiento

Minimiza el tiempo muerto de movimiento del proceso de distribución maximizando la productividad y mejorando el control del inventario.

Categorización de los Productos

Una adecuada categorización ayuda a ubicar/identificar/clasificar tipos de productos que permitan su máxima eficiencia en el manejo del mismo permitiendo medir y mejorar la productividad de tu equipo.

Automatizar

Entre menos manipulación en el flujo manual más exactitud tendrás en tu inventario y control del mismo. Cada vez más hay que enfocarnos en Automatizar



Logrando estar enfocados en estos 4 puntos mejora la cadena de suministro ya que ayudaría a bajar los costos permitiendo programar y coordinar bajos niveles de stock controlando los procesos que no agreguen valor (desperdicio) y maximizando la productividad del proceso.